1. Investiga y planifica. Es fundamental que antes de ponerte manos a la obra analices el mercado, solo así sabrás las necesidades del sector e identificarás las oportunidades.
- Identifica tu nicho: Investiga el mercado para encontrar un nicho con demanda. Analiza la competencia y determina qué puedes ofrecer que te diferencie.
- Define tu target: Conoce a tu cliente ideal. Define las características de tu público objetivo, sus intereses y comportamientos para adaptar tu oferta a sus necesidades.
- Plan de negocios: Crea un plan de negocios detallado que incluya tus objetivos, estrategias de marketing, estructura de precios y proyecciones. Es fundamental que tengas en cuenta previsiones y un plan de crecimiento, solo así serás capaz de marcarte objetivos.
2. Elige tu modelo de negocio. Partimos de la base que vas a vender un producto físico, por ello, ahora te toca definir cómo lo vas a hacer:
- Venta propia. Eres fabricante o tienes la propiedad del producto que vendes.
- Dropshipping. Vende productos de proveedores externos sin necesidad de manejar inventario o realizar envíos tú mismo.
- Suscripciones. Ofrece productos o servicios bajo un modelo de suscripción recurrente.
3. Registro legal y estructura del negocio. Probablemente la parte menos divertida del arranque de cualquier ecommerce, pero sin duda una de las más importantes.
- Registro de la empresa: Decide la estructura legal de tu negocio (individual, sociedad, etc.) y regístralo en las autoridades locales.
- Licencias y permisos: Obtén las licencias y permisos necesarios para operar legalmente en tu área.
- Nombre y dominio: Escoge un nombre para tu tienda y compra un dominio web que refleje tu marca.
4. Configura tu plataforma eCommerce
- Elige la plataforma en la que vas a desarrollar tu ecommerce: Estudia las diferentes alternativas que hay (Shopify, Prestashop, WooCommerce, Magento, etc.) y elige aquella que mejor se adapta a tus necesidades y objetivos: internacionalización, fácil uso, etc.
- Diseño y personalización: Diseña tu tienda online, asegurándote de que sea, no solo visualmente atractiva, sino también fácil de navegar. Usa plantillas personalizables si es necesario.
- Establece los pasos de tu proceso de compra. Se escribe mucho sobre cómo debería ser el proceso de compra ideal, pero lo cierto es que dependerá de tu tipo de cliente. Puede ser que para tu target sea ideal la compra como invitado, pero en otros no. Igualmente puede estar genial pedir 10 campos en unos casos, o 5 en otros. Define los pasos de tu proceso y ahórrate quebraderos de cabeza después.
- Define y configura los métodos de pago que ofrecerás: Activa aquellas formas de pago que permitirán a tus clientes pagar por tus productos, como Paypal, Stripe, Bizum, etc.
5. Gestiona tus Productos
- Elabora tu catálogo de productos: Sube y organiza tus productos en la tienda. Incluye descripciones detalladas, imágenes de alta calidad y vídeos, así como los precios.
- Comienza a gestionar tu inventario desde ya: asegúrate de tener un sistema para rastrear existencias y evitar faltantes o sobrestock.
6. Establece tu política de envíos
Define cómo vas a enviar los productos a tus clientes: No solo plazos, también costes e informe sobre la empresa que se encargará de gestionar los envíos. Incluso, puedes integrar diferentes carriers para dar una mayor flexibilidad a tus clientes.
7. Define tu política de devoluciones y cambios
Tan importante es hacer llegar tu producto a tu cliente como gestionar la devolución o cambio en caso de que el cliente lo solicite. Por normativa, debes ofrecer al cliente el derecho de desestimiento, a partir del cual tendrá un plazo de tiempo para poder tramitar su devolución y/o cambio.
Este proceso es crucial para fomentar la recurrencia de tus clientes, y es que la post-venta tiene un papel fundamental en la generación de una comunidad. De hecho, en nuestro último informe sobre el Estado de las Devoluciones afirmamos que 9 de cada 10 clientes no volverían a comprar en un ecommerce tras sufrir una mala experiencia post-venta.
Por ello, es importantísimo que igual que defines tus métodos de pago o tu política de envíos, también definas tu política de devoluciones y cambios. Para ello, incluye información relativa a plazos, costes, condiciones y operativa, y además, ofrece diferentes alternativas de devoluciones a tus clientes. Aquí te dejo algunas opciones:
- Reembolso instantáneo: permite que tus clientes reciban su dinero en menos de 6 segundos tras haber solicitado la devolución.
- Cambio instantáneo: facilita que tu cliente cambie el producto que no quiere por la talla correcta, u otro color e incluso otro producto que se adapte más a sus necesidades. Así conseguirás reducir el proceso de 12 días a 4. Y todo ello sincronizado perfectamente con tu stock.
- Reembolso y cambio tradicional.
- Store credit. Una opción más para fomentar la recurrencia de tus clientes.
8. Estrategia de Marketing
- SEO: Optimiza tu sitio web para motores de búsqueda con el objetivo de aumentar la visibilidad y atraer tráfico orgánico. Para ello, no te olvides de las propias descripciones de los productos.
- Publicidad: Implementa campañas de publicidad pagada en Google Ads, Facebook Ads, o plataformas similares.
- Redes Sociales: Crea perfiles en redes sociales relevantes y comienza a construir una comunidad alrededor de tu marca.
- Email Marketing: Usa herramientas de email marketing para crear listas de correos y enviar newsletters informativos, ofertas y actualizaciones.
9. Atención al Cliente y Soporte
Define cómo vas a gestionar las incidencias y dudas de tus clientes. Para ello, implementa opciones de soporte como chat en vivo, correos electrónicos y una sección de preguntas frecuentes (FAQ).
10. Lanzamiento y evaluación
- Prueba el site: Antes de lanzar, realiza pruebas exhaustivas para asegurarte de que todo funcione correctamente (funcionalidades, pagos, envíos).
- Lanzamiento: Anuncia el lanzamiento de tu tienda a través de tus canales de marketing y comienza a atraer a los primeros clientes.
- Monitoriza y ajusta: Usa herramientas analíticas para monitorear el rendimiento de tu tienda y ajusta tus estrategias según sea necesario.
11. Escalado y crecimiento
- Optimización continua: Basado en el análisis de datos, mejora la experiencia del usuario, optimiza las campañas de marketing y ajusta el inventario.
- Expansión de productos y mercados: Considera ampliar tu gama de productos o explorar nuevos mercados y canales de venta.
Y para terminar, mantente informado de todo lo que ocurre en el ecosistema ecommerce. Sigue las tendencias del sector y adapta tus estrategias para mantener la relevancia y competitividad en el mercado.
Cada uno de estos pasos puede tener varios detalles adicionales y desafíos, pero seguir una guía estructurada te ayudará a abordar el proceso de manera organizada y efectiva. ¡Buena suerte!